AUGE Y DESARROLLO El gran auge de la sedería requenense en la primera mitad del s.XVIII queda
plasmado en el sorprendente aumento de los telares existentes en la ciudad,
cuyo número pasó de 300 en 1.725, 445 telares en 1735, cinco años después
había 500, 618 en 1.751, en 1.777 figuran 750 telares y en los Estatutos de la
Real Sociedad Económica de Amigos del País de 1.784 se aporta una cifra de
800 telares. También se plasma en el hecho de que Requena llegó a superar en
consumo de materia prima a una ciudad de la entidad de Sevilla (más de
78.000 libras de seda cruda)
La población de Requena en 1.699 era de algo más de tres mil vecinos. En poco
menos de un siglo se triplicó, pasando de 9.500 habitantes en el año 1.784,
(Cuenca la capital, contaba con la mitad), de los cuales se ocupaban en la
industria de la seda unas 3.500 personas, funcionando como se ha dicho la
cantidad de 800 telares (cada telar ocupaba a un hombre, una mujer y un
muchacho), 42 tornos (con 5 hombres y 15 mujeres en cada uno) y 8 tintes. |
Este singularísimo movimiento textil estaba organizado de la siguiente forma: El
mercader adquiría en Valencia las madejas de seda, y teñidas, las entregaba a
los tejedores. Estos realizaban su trabajo en un rústico telar, percibiendo un “tanto” por vara tejida. Seguidamente se confeccionaban y sellaban las piezas,
siendo de notar que gran parte de la producción era enviada al puerto de
Valencia, pero también a Córdoba, Sevilla, Salamanca, Madrid y Cádiz desde
donde pasaban a Iberoamérica. |
En los tres siglos de sedería en Requena, el negocio sufrió numerosas fluctuaciones, debido a múltiples causas: guerras, epidemias, descenso de las exportaciones a América, plagas en el gusano de seda, encarecimiento de la materia prima, importación de tejidos más económicos, conflictos internos entre tejedores y comerciantes,… pero también en la misma estructura de la producción preindustrial y en la imposibilidad de competir con otros fabricantes (catalanes y franceses sobre todo) y sus maquinarias más modernas. |
Llamamiento publicado en Periódico local: “ El Eco de la Región”. |